La transposición de grandes vasos es una de las cardiopatías congénitas más graves que pueden afectar a un recién nacido. Sin embargo, en las últimas décadas se han realizado innumerables avances en cirugía que aportan un rayo de luz a la gestión de esta enfermedad. Por tanto, veamos en qué consiste la transposición de grandes vasos y la esperanza de vida de quienes viven con esta condición.
¿Qué es la transposición de grandes vasos y cómo afecta al organismo?
La transposición de grandes vasos (TGV) es una alteración congénita que ocurre desde el nacimiento. Mientras que en un corazón sano la sangre bombea desde el corazón hacia el cuerpo a través de la aorta y la sangre sin oxígeno llega a los pulmones por la arteria pulmonar, en la transposición de grandes vasos la aorta y la arteria pulmonar están invertidas. Por tanto, la sangre rica en oxígeno no llega correctamente a los órganos y se produce una oxigenación insuficiente.
Los síntomas de la TGV incluyen cianosis (coloración azulada de la piel), dificultad para respirar, falta de apetito y problemas de crecimiento.
Si bien los bebés con este defecto cardíaco pueden sobrevivir durante algunos días o semanas gracias al foramen oval y al conducto arterial (conductos que permiten la oxigenación de la sangre), lo cierto es que la TGV es una emergencia médica que requiere tratamiento inmediato. La forma más común de esta anomalía es la trasposición de grandes arterias o TGA. Si quieres más información sobre esta enfermedad, tenemos un artículo donde te contamos más sobre qué es la transposición de las grandes arterias y qué tipos hay.
Opciones de tratamiento para la transposición de grandes vasos
El tratamiento principal para la TGV es la cirugía correctiva. Sin embargo, durante las primeras horas de vida, los médicos administrarán prostaglandina por vía intravenosa con el objetivo de mantener abierto el conducto arterial y permitir la oxigenación de la sangre. En otros casos, se creará un orificio en el tabique interauricular mediante un procedimiento conocido como septostomía para facilitar la mezcla de la sangre y, por tanto, la circulación del oxígeno.
Posteriormente, durante las dos primeras semanas de vida, se procederá al tratamiento quirúrgico mediante un intercambio o switch arterial según la técnica de Jatene. Este procedimiento consiste en desplazar la aorta desde el ventrículo derecho hacia el ventrículo izquierdo (su posición natural) y situar la arteria pulmonar en el ventrículo derecho. Asimismo, se realizará la transferencia de las arterias coronarias hacia la nueva aorta.
Si bien existen distintas opciones quirúrgicas como la cirugía de Senning o Mustard, el switch arterial ha sido la técnica quirúrgica más empleada por los médicos durante los últimos años para reparar la transposición de grandes vasos y la esperanza de vida de los pacientes.
Esperanza de vida en la transposición de grandes vasos
Gracias a la cirugía de switch arterial, la mayoría de los niños que se someten a esta operación sobreviven hasta la edad adulta con buena calidad de vida. De hecho, muchos pacientes operados mediante las técnicas actuales pueden llevar una vida activa e incluir actividades físicas y deportivas bajo supervisión médica. Otros, en cambio, pueden experimentar fatiga, menor tolerancia al ejercicio y requerir medicación a largo plazo para controlar arritmias u otros problemas cardíacos.
Factores que influyen en la esperanza de vida
En las últimas décadas, la esperanza de vida de los pacientes con TGV ha mejorado significativamente. No obstante, esto dependerá de los siguientes factores:
- Diagnóstico temprano. Cuanto antes se detecte la condición, mayores son las posibilidades de éxito en la cirugía. De hecho, las ecografías fetales permiten la detección de la anomalía antes del nacimiento y facilitan la planificación del tratamiento inmediatamente después del parto.
- Calidad de la intervención quirúrgica. La experiencia del equipo médico y el centro hospitalario son claves para minimizar complicaciones. Además, los avances en cirugía neonatal, el desarrollo de técnicas de imagen más precisas y el tratamiento postoperatorio han aumentado la esperanza de vida de los pacientes con TGV. Actualmente, se están investigando terapias genéticas y nuevos medicamentos que podrían prevenir complicaciones a largo plazo y mejorar la calidad de vida de estos pacientes.
- Complicaciones postoperatorias. La aparición de problemas como insuficiencia cardíaca, arritmias o estenosis puede afectar a la calidad y esperanza de vida del paciente. En personas que han sido sometidas a cirugías de Senning o Mustard, la esperanza de vida puede verse reducida debido a complicaciones como arritmias o disfunción ventricular derecha, entre otras.
Complicaciones en la transposición de grandes vasos
Se estima que más del 90 % de los pacientes puede llegar a la adultez sin secuelas graves. Sin embargo, y a pesar de los avances médicos, algunas personas pueden presentar complicaciones a lo largo de su vida, como las siguientes:
- Arritmias cardíacas. Especialmente en aquellos pacientes que se han sometido a una cirugía mediante técnicas antiguas, como Mustard y Senning.
- Dilatación de la neoaorta y/o estenosis de las ramas pulmonares. Este tipo de complicaciones pueden requerir intervenciones adicionales.
- Problemas en las arterias coronarias. La alteración en la circulación sanguínea puede afectar al suministro de oxígeno y nutrientes del corazón y derivar en enfermedades cardiovasculares como arteriosclerosis (endurecimiento de las arterias), infartos o anginas de pecho.
- Disfunción del ventrículo derecho. Esta parte del corazón no está diseñada para soportar la presión de la circulación sistémica. Si este esfuerzo es prolongado, el ventrículo derecho puede debilitarse y desarrollar insuficiencia cardíaca.
La transposición de grandes vasos y la esperanza de vida han cambiado drásticamente gracias a los avances médicos y quirúrgicos. Aunque esta cardiopatía congénita sigue siendo una afección grave y compleja, la mayoría de los pacientes pueden disfrutar de una vida larga y activa. No obstante, la evaluación, el tratamiento y el seguimiento de un equipo médico especializado son cruciales para garantizar el mejor pronóstico posible. Si tienes dudas o necesitas más información, escríbenos mediante nuestro formulario de contacto.